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La industria de la construcción es un sector importante no sólo para México. En este artículo hablaremos sobre el papel que desempeña en Euskadi, a través de las palabras de Laura Gil, directora de Construcción de Altuna y Uria. Acompáñanos a leer sobre su visión de su profundo impacto en la economía vasca.

La transformación del sector de la construcción en Euskadi es un tema relevante que merece atención. Laura Gil, directora de Construcción de Altuna y Uria, ofrece una visión profunda sobre el impacto de esta industria en la economía vasca. En 2023, la construcción alcanzó una facturación de 10.700 millones de euros, representando el 13% del PIB de la región. Este artículo explorará las oportunidades y desafíos que enfrenta el sector en su camino hacia la sostenibilidad y la digitalización.


La construcción se presenta como un motor clave para la economía vasca, y Altuna y Uria se posiciona como un referente en este ámbito. Con más de 50 años de trayectoria, la empresa ha dejado su huella en obras emblemáticas que han transformado el entorno de Euskadi. Su enfoque abarca tanto la obra civil como la edificación, especializándose en diversas áreas como la construcción subterránea y la rehabilitación. Este enfoque diversificado no solo mejora la capacidad operativa de la empresa, sino que también contribuye al desarrollo regional.


A medida que el sector de la construcción avanza, enfrenta desafíos significativos, entre los que destacan la sostenibilidad y la digitalización. La industria debe adoptar prácticas que favorezcan la economía circular y la reutilización de materiales. Este cambio hacia una construcción más sostenible es esencial para mejorar la competitividad y atraer a nuevos talentos. Las empresas deben trabajar en conjunto con universidades y centros educativos para crear programas que fomenten el interés en carreras relacionadas con la construcción, asegurando así un flujo constante de profesionales capacitados.


La digitalización y la industrialización son vistas como herramientas clave para mejorar la eficiencia y optimizar procesos. Altuna y Uria está implementando nuevas tecnologías, como gemelos digitales y herramientas de realidad aumentada, que permiten anticipar problemas en las obras antes de que ocurran en el mundo real. Esta adopción de tecnología no solo mejora la gestión de proyectos, sino que también abre nuevas oportunidades de negocio, permitiendo a las empresas innovar y desarrollar productos de alta calidad.


Finalmente, la inclusión de la mujer en el sector de la construcción es una transformación que está ganando impulso. Gil destaca el compromiso de Altuna y Uria por promover la igualdad de género, con un equipo directivo donde las mujeres ocupan posiciones clave. La creciente presencia femenina en la industria es un indicador de cambio, y Gil enfatiza la importancia de visibilizar estos logros para inspirar a las nuevas generaciones. En conclusión, el sector de la construcción en Euskadi se encuentra en un momento crucial, con oportunidades significativas para el crecimiento sostenible y la innovación, así como la necesidad de atraer talento diverso y capacitado.


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